“La Oración de Jesús”
(9) Yo ruego por ellos; no
ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son, (10) y todo lo mío es tuyo, y lo tuyo
mío; y he sido glorificado en ellos. (11) Y ya no estoy en el mundo; mas éstos están en el mundo, y yo
voy a ti. Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que
sean uno, así como nosotros. (12)
Cuando estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; a los
que me diste, yo los guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de
perdición, para que la Escritura se cumpliese. (13) Pero ahora voy a ti; y hablo esto en el mundo, para que tengan
mi gozo cumplido en sí mismos. (14)
Yo les he dado tu palabra; y el mundo los aborreció, porque no son del mundo,
como tampoco yo soy del mundo. (15)
No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal. (16) No son del mundo, como tampoco yo
soy del mundo. (17) Santifícalos
en tu verdad; tu palabra es verdad. (18)
Como tú me enviaste al mundo, así yo los he enviado al mundo. (19) Y por ellos yo me santifico a mí
mismo, para que también ellos sean santificados en la verdad. (20) Mas no ruego solamente por éstos,
sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, (21) para que todos sean uno; como tú,
oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que
el mundo crea que tú me enviaste. (22)
La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como
nosotros somos uno.
oraciones. El Padre le contesta a su hijo y todo el que se resiste a Él está endureciendo sus corazones a las oraciones de Cristo quien oró por ellos en la tierra y quien aún sigue orando. Dios los bendiga!
No comments:
Post a Comment